El día 17 de abril se celebró la Santa Misa del Domingo de Ramos. Este año, ante la dificultad que iba a suponer una afluencia mayor de fieles que en años anteriores conforme a lo que se viene experimentando desde noviembre, con el embudo que se iba a formar en la entrada de la Basílica a la salida y el retorno de la procesión de los ramos a consecuencia del túnel de seguridad situado bajo la imagen de la Piedad, más el paso por el arco de detectores de seguridad, se optó por celebrar la Misa y la procesión inicial en la explanada posterior del recinto sagrado del Valle de los Caídos, en el cuadro de la Abadía, la Escolanía y la Hospedería.
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Tras la bendición de los ramos y la lectura del Evangelio que se realiza en ese momento, la procesión discurrió por una mitad del cuadro de la explanada y regresó al altar provisional, donde se celebró la Santa Misa a continuación. La asistencia de fieles fue altamente numerosa y, a pesar de una reserva importante de sillas para acogerlos, hubo bastantes que tuvieron que quedar de pie. Algunos sacerdotes de la Comunidad estuvieron confesando y fueron muchas las personas que se acercaron a recibir el sacramento de la Penitencia o Reconciliación.
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Al final de la Semana Santa se indicarán algunos datos más sobre las celebraciones de estos días.