El día de la Inmaculada Concepción, 8 de diciembre, siete escolanes del 4º curso de Educación Primaria recibieron la Primera Comunión en la Misa solemne que la Comunidad celebró en circunstancias anómalas. Debido al cierre actual de la Basílica y pese a que la Comunidad ha intentado que la Delegación del Gobierno permitiera el acceso a ella por parte de las familias de los niños, la ceremonia hubo de tener lugar en el vestíbulo central entre la Escolanía y la Abadía, por el que se entra al túnel posterior que conduce a la Basílica. Por un lado, se trató de habilitar el espacio de la forma más digna posible y de calentarlo con unas “setas”, pues es muy frío de ordinario; por otra parte, la solemnidad de la celebración y el canto de la Escolanía suplieron en la medida de lo posible la imposibilidad de disponer de la Basílica, que es donde los niños honran diariamente a Dios con sus voces y como monaguillos. Después de la Santa Misa, todos los niños de la Escolanía y los monjes encargados de su formación bajaron a la Basílica a hacerse unas fotos, a lo cual tampoco pudieron tener acceso los padres y no pudieron hacerse allí una foto con sus hijos.