Un año más, la celebración de la Semana Santa en el Valle de los Caídos ha discurrido con la armonía de solemnidad litúrgica y recogimiento espiritual que la caracteriza.
_x000D_
_x000D_
El Domingo de Ramos, 24 de marzo, la procesión y la Misa contaron con la asistencia de numerosos fieles y de un grupo de unos 50 peregrinos venidos de Portugal, además de otros llegados de Austria. También fueron notablemente solemnes y concurridos los Oficios del Jueves y del Viernes Santo, así como la Vigilia Pascual. Desde la época en que tuvo lugar el cierre de la Basílica, el número de fieles creció de manera muy llamativa.
_x000D_
_x000D_
Al igual que el año anterior, hay que destacar la presencia de un grupo muy considerable de antiguos escolanos (entre ellos, los que terminaron sus estudios en el Valle el curso pasado), que vienen a residir estos días en las instalaciones de la Escolanía y a colaborar con su canto y en otras facetas de la liturgia. Contribuyen de forma importante a crear un estupendo ambiente entre los niños y sus familias y son el mejor testimonio del cariño con que recuerdan y añoran sus años en la Escolanía.
_x000D_
_x000D_
Por otro lado, en la Hospedería externa se han llevado a cabo las habituales actividades espirituales: conferencias sobre los días santos, más la Hora Santa del Jueves y el Vía Crucis del Viernes. Este año, un grupo de seglares ha tomado buena parte de las iniciativas, en colaboración con el P. Alejandro de Alviz como capellán de la Hospedería.